Música-Cine-Literatura-Filosofía

martes, 19 de mayo de 2009

¿Por qué la noche nunca fue eterna?


En la mirada se encuentra la nostalgia
En el silencio las voces del recuerdo
De aquellos anhelos, de aquellos deseos

Por que alguna vez hubo un comienzo
Por que el sol no se oculto
Por que la noche nunca fue eterna

(El eco preguntó)
¿Por qué la noche nunca fue eterna?

sábado, 2 de mayo de 2009

Utopía de Tomás Moro


La isla de utopía, antes llamada Abroxa es un país, que vive según sus propias reglas, que son pocas y claras, respetando a los demás pueblos, viviendo de la mejor forma, a diferencia de los pueblos occidentales. Ya estas tenían una experiencia de mil años atrás, que garantizaban la buena formación de sus instituciones. La historia que nos cuenta Tomás Moro, comienza en una plática con Pedro Guilles y un viajero llamado, Rafael Hitlodeo. Éste nos cuenta como los príncipes de ahora (en su tiempo) se dejan llevar por la codicia y los malos consejos de sus legisladores, buscando la propia riqueza en vez de la riqueza del pueblo. Su mal elaborados planes de economía para el pueblo, que debiera sustentarse con la agricultura, el arrebato de tierras y su mala distribución llevan al fracaso a sus propios pueblo. Las malas leyes, que juzgan de igual cualquier ilícito con la intención de evitarlos, sólo agravan más la situación, no son capaces de ver que un castigo justo puede componer las ofensas. Estos príncipes abogan por la pena capital, no reconociendo el valor supremo de la vida.

Moro, cuestiona a Hitlodeo, el porqué no aconseja a los príncipes, respondiendo éste que como tal ambición los ciega sólo ven lo que quieren ver, y no se prestan a escuchar las buenas razones. Cada vez que lanza una crítica, Hitlodeo trae los ejemplos de la forma de vivir en la isla de utopía. En este país existe una lengua común y unas leyes iguales para todos, su capital es Amauroto en donde radica el senado, que es elegido por todos los ciudadanos que ahí habitan. La ciudad se sustenta así mismo distribuyendo el trabajo entre todos los ciudadanos, de los cuales cada uno trabaja 6 horas diarias; si todos trabajan aun con poco tiempo, este se distribuye de tal manera que es suficiente para hacer sustentable al pueblo. La actividad básica es la agricultura, pero en su tiempo libres los ciudadanos se dan a la tarea de aprender otras actividades, el ocio no es bien visto. La holgazanería y los juegos de azar no existen, solo los juegos que desarrollan la inteligencia, que son dos, se dedican de igual modo a las actividades culturales y al arte de la guerra. Otros principales oficios son la carpintería, la herrería, el tejido, siendo los productos factor de intercambio, que no pide nada, que dá pero sabe que no necesita, por que todo le es dado. El dinero no existe, la riqueza no se amaza, esta existe sólo cuando se siente el peligro y la inseguridad de la propia existencia, pero ante la garantía de un sustento de parte del gobierno, los ciudadanos no necesitan más que lo necesario. La tierra no es una propiedad personal es colectiva, se da para trabajarla y la gente intercambia parcelas para habitar cualquier casa, de este modo se demuestra que todo lo que hay es del pueblo. La relaciones entre las personas o matrimonios se dan después de los 18 años en las mujeres y cuatro años después en los hombres; el adulterio o las relaciones premaritales son prohibidas, esta se castigan con la esclavitud y si existe reincidencia con la pena de muerte. Con respecto a los esclavos los hay voluntarios, como los que vienen de otros países a servir a la gente, no son tratados como cuales, le son proporcionadas todas sus necesidades y se pueden ir cuando lo deseen. Los prisioneros de guerra no son tomados como rehenes y luego de un tiempo son perdonados. Lo que cometen algún ilícito y después de un tiempo demuestran buen comportamiento reingresan a la actividad directa de la ciudadanía. En este país no se comete el error de conquistar otros países para así no descuidar el propio, el príncipe no saque a su pueblo, por que sabe que un príncipe no vale más por rico que sea, sino que vale más cuando su pueblo es rico; pero estas riqueza son producto de que nadie y todos sean dueños de lo que exista. Menciona que la propiedad es lo que hace ambiciosas a las personas y es el mal de todo, en cambio el colectivismo y el sustento entre todos con sus aportaciones enriquece. La satisfacción de los placeres superiores o sea los del alma son los mejores, los de la naturaleza sólo se satisfacen cuando se sienten, como el tener sed o tener hambre. Se les enseña a los ciudadanos a menospreciar las riquezas, y aunque directamente no las conozcan, no las deseen pues todo les es proporcionado. Ni la ambición de la conquista ni la posesión de riquezas les atraen. Si bien, cuando lo necesitan hacen intercambio de sus productos restantes con sus países vecinos, para buscar lo necesitan, ya sea oro u otro material; pero este oro no lo cobran si no lo creen necesario, un ejemplo es cuando existe un peligro de guerra el oros es utilizado para comprar protección. A pesar de no ser un pueblo guerrero, se preparan con el arte de la guerra, pero en cuando puedan evitarla la batalla y ganarla mediante la diplomacia el triunfo es mejor. Rara vez se enfrentan a sus enemigos, pues contratan a otros pueblos para que peleen por ellos, por lo cual son recompensados, a veces sólo lo hacen para ayudar a pueblos oprimidos. Tal pueblo no existe en occidente, pues ellos, los utopos se rigen por pocas leyes y claras para que sean entendidas por todos y respetadas, en cambio en occidente existen muchas leyes que ni siquiera se recuerden que existan lo que implica que no se respeten y mucho menos se conozcan.

Ciertamente es difícil la existencia de un país así, pero eso no implica su inexistencia como ideal. Se presenta como tal, pero se busca alcanzar, tantas críticas ya oídas sobre el tema, que es mejor lo que se presenta como real, que las soluciones sólo se pueden dar de lo que es, pero por que no mirar hacia adelante: un ideal sirve para vislumbrar. Desde el momento que se comienza la lectura nos podemos dar cuenta que es una crítica a la organización política y social, ocasionada por las desigualdades sociales. Los pueblos se mueren mientas los príncipes se hace más ricos, eso me trae a colación el país que si existe, el nuestro. Pero en fin, queda demostrado una vez más a modo de una historia, para muchos inalcanzable y para otros, como para mí, la esperanzadora posibilidad que tal país pudiera existir. Este tipo de escritos utópicos nos proporciona la visión de lo malo que ocurre y la necesidad de un cambio, de un cambio que aparece como posible. Lo malo es que no nos enseña como se logra tal cambio, si en ese cambio hubo guerras, si ante tal cambio hubo oposiciones, el país se presenta cuando ya ha logrado la perfección. La confianza en el hombre se demuestra ante el respeto y la tolerancia hacia los otros, el mayor ejemplo es la religión. Es de entenderse también en la confianza humana, que la guerras que pudieron haberse dado, llevaron al hombre a la comprensión de que ellas sólo lo llevarían a la destrucción, por lo que son frenadas para la propia supervivencia, a modo de una valoración cultural expuesta en las necesidades históricas de su pueblo, mostradas como una moral del deber ser. Sin embargo, podría ser que si tal país existiese tendría que serlo pequeño, de otra manera se me hace difícil, la distribución de los pueblos y una lengua en común. Al fin y a cabo utopía sabia que tenía que ser pequeño, que no podía anexar más territorios, que no podría sustentarlos lo que los llevaría a su propia ruina.

De nuevo, hay que hacer el mismo proceso que se hace con los demás autores, mirar su contexto y ver el adelanto de su pensamiento, recordemos que esta obra y su autor son precursores de un humanismo. Su misma concepción de libertad del hombre, aun más cuando eran oprimidos le da valor a su pensamiento que no traicionan. Tomás Moro de alguna manera se da cuenta que las leyes morales religiosas o las que se dan de manera legal, no son suficientes para regular la conducta humana que están son sometidas a los interés de unos cuanto, de esto no se salva la religión, pues son los hombres quienes dictaminan que es justo o no, y hacen de divino lo que consideran. En la utopía no importan tanto las leyes o sus contenido sino como se dan, o sea la forma. La protección que gira en torno a ella, la benevolencia del príncipe, la educación de sus ciudadanos, el seguimiento de una ley natural y el respeto a la vida, aunado a su organización y distribución de las riquezas naturales, hicieron de Utopía un lugar posible.

Probablemente en la actualidad, éste tipo de países son los que vayan en contra del capitalismo, solo existan unos cuantos países: casos como Suecia u Holanda. Que su economía es estable y todos son de clase media alta. Pero en los países ricos en naturaleza y pobres de atudominio, tanto por ignorancia como por imposición, se hace difícil conseguir ciertos logros, aun el mínimo. Sin embargo, esta obra me hace reflexionar en el sentido moral tan ligado a las leyes, en el término justicia que significa dar a cada uno lo que merece, o en la máxima Kantiana: Obra de tal modo que desees que tu actuar se torne un principio universal.

lunes, 23 de marzo de 2009

Después de diez meses

Después de diez meses de darle seguimiento ha este blog, que trató aunque de manera personal y siempre acorde, de dar un apertura de manera general a diversos conocimientos, ha llegado la hora de dar las gracias a todos aquellos que se tomaron la molestia de pasar por esta página: a los asiduos lectores, a los que se perdieron por aqui, los que nunca supieron, y sobre todo a los que seguirán pasando por aquí. Por ahora es el momento de evolucionar, de leer, escribir, reflexionar y sobre todo de crear.

El blg seguirá abierto, hasta que encuentre un motivo y el momento para continuar. Cualquier petición de libros, reseñas, ensayos, será tomado en cuenta. Nos estamos leyendo.

martes, 24 de febrero de 2009

La Filosofía y el filósofo (Sócrates)

La purificación es la separación del alma del cuerpo, el desligamiento del cuerpo como de una atadura. Se le da la misma definición a la muerte. Desligar el alma es la aspiración sólo de los que filosofan. Los que filosofan actúan con moderación, es decir, el no dejarse excitar por los deseos, si no mostrarse indiferente y mesurado. En el sentido recto de la palabra los que filosofan no practican otra cosa que el morir y el estar muertos.

La filosofía es una forma de purificación y muerte en el sentido de que busca también razones fuera de lo material, no dejándose llevar por los deseos que uno pueda poseer.

Los filósofos verdaderos son los que contemplan la verdad, la veracidad y no admiten la mentira, sino la odian y aman la verdad.

Los primeros hombres comenzaron a filosofar movidos por la admiración. Pero el que se plantea un problema o se admira, reconoce su ignorancia. Pero al huir de su ignorancia, busca el saber en vista del conocimiento y no por su utilidad. Por eso se dice que es un saber libre y desinteresado.

Es justo que la filosofía sea llamada ciencia de la verdad; pues el fin de la ciencia teórica es la verdad, y el de la práctica, la obra.

La filosofía ha existido siempre quizá el termino aún no se había dado, pero desde que el hombre existe le ha sido beneficiosa, primero al admirarse, al reflexionar, al cuestionarse y tratar de responder a sus preguntas. Como dice Cicerón:
“Tú nos diste la tranquilidad de la vida y nos quitaste el terror de la muerte”.

La sabiduría es el conocimiento de las cosas divinas y humanas.

BELLEZA Y VERDAD

Al leer el título, vemos y notamos, que sí la belleza es algo que esta por encima de las cosas como una realidad posible en ellas, debe guardar una relación profunda con la verdad. Los autores que a continuación veremos creían ver en la belleza una solución y complementación a sus teorías.

Arthur Schopenhauer: lo sublime
Shopenhauer hace una distinción entre lo bello y lo sublime, para exaltar la importancia del arte. La distinción entre lo bello y lo sublime es la siguiente: frente a lo bello el conocimiento puro vence sin lucha, pues la belleza del objeto, es decir, su propiedad de facilitar el conocimiento de la idea, descarta sin resistencia la voluntad y el conocimiento de las relaciones puesto al servicio de ella. La conciencia subsiste en calidad de sujeto puro del conocimiento, y de la voluntad no queda ni recuerdo. Por el contrario, frente a lo sublime, ese estado de puro conocimiento tiene que ser conquistado previamente por el individuo, arrancándose con violencia y conscientemente de las relaciones del objeto, que conoce que son desfavorables para su voluntad y elevándose libre y deliberadamente por encima del querer y del conocimiento de cuanto con él se relaciona. Para Schopenhauer esa es la virtud del arte en cuanto a lo bello, también subrayó el papel de la voluntad como la fuerza irracional de la naturaleza humana. Sostenía que el arte es la única manifestación del conocimiento que no está sujeta a la voluntad y por tanto, lo veía como el único medio posible de huir de este mundo sin recurrir a la razón(este huir, posteriormente como veremos Nietzsche lo llamará justificación).
En resumen, Schopenhauer creía que las formas del Universo, como las formas platónicas eternas, existen más allá de los mundos de la experiencia, y que la satisfacción estética se logra contemplándolos por el propio interés que provocan, como medios de eludir el angustioso mundo de la experiencia cotidiana. Otorgó una especial importancia a la música y analizó, de un modo original, los rasgos del artista.

Friedrich Nietzsche
Nietzsche en la forma de abordar sus teorías filosóficas, propone una notable forma de escribir, la prosa libre; característico de sus obras, que le dan un toque sencillo y a la vez profético. He tomado la interpretación estético-musical de Nietzsche por la relación con Schopenhauer, pero al final notaremos la diferencia entre él y Schopenhauer.
Interpretación estético-musical. El movimiento estético-musical nietzschano comienza con el mismo Nietzsche, qué tomo espíritu de la música como punto de partida para explicar el origen de la tragedia griega. Lo artístico se le representó entonces a Nietzsche como una justificación del mundo (es muy interesante este punto). En sí mismo considerado, este mundo es insoportable. Pero cuando el artista sabe presentar las cosas terribles y problemáticas, entonces habla por él "un instinto del poder y de la majestad… no teme ya… El arte se afirma".
Nietzsche resaltaba la importancia del arte, de modo parecido a otros como impulsor de vida (Bersong). Es notable la similitud al pensamiento de Schopenhauer, pero Nietzsche dirá que al estar en el mundo lo que nos queda es enfrentarlo. Es verdadero lo que sirve para promover y elevar la vida.
En resumen: Friedrich Nietzsche aceptó en sus primeras obras la influencia de la visión de Schopenhauer, para discrepar más tarde de su enseñanza. Nietzsche estaba de acuerdo con que la vida es trágica, pero esta idea no debería excluir la aceptación de lo trágico con alegre espíritu, pues su realización plena es el arte. Éste se enfrenta a los terrores del Universo y los puede modificar, generando algo bello a partir de cualquier experiencia. Al hacerlo, transforma las angustias del mundo de tal modo que pueden ser contempladas con placer.

F. W. J. Schelling
Es importante hacer notar, el pensamiento de Schellin en su Filosofía trascendental, por que le da de alguna forma un valor más real como forma de conocimiento y no tanto existencia de un querer enfrentar al mundo con irracionalismo.
Filosofía trascendental. "Nuestro corazón no se satisface con la simple vida del espíritu. Hay algo en nosotros que tiene exigencias de realidad esencial… Lo mismo que el artista no descansa en la idea de su obra sino sólo cuando ha llegado a la representación corporeizada, copia de la forma espiritual perfecta".
Tres partes comprenden la filosofía trascendental: f. Teorética (se nos da el modo como se desenvuelve la naturaleza a partir de la inteligencia, se presenta de modo inconciente), la F. Práctica (muestra como se originan también de la inteligencia las acciones libres realizadas concientemente), y la filosofía del arte (que consiste en una síntesis entre la 1ª y la 2ª y pone de manifiesto que lo inconsciente y lo conciente coinciden en una realidad. En el arte y en las creaciones artísticas tienen su encuentro, en la polaridad e identidad, naturaleza y espíritu, conciente e inconciente, la ley y la libertad, cuerpo y alma, individualidad y universalidad, sensibilidad e idealidad, finito e infinito. El secreto de la belleza está en que lo infinito desciende a encarnarse visiblemente en lo finito y en que lo finito se torna símbolo de lo infinito.
Schelling propone al arte como una posibilidad real del conocimiento, a través de las formas espirituales que se realizan o se llevan a cabo en la realización de la obra de arte.
En resumen: Para Schelling, en la obra de arte se produce la captación, por la belleza y a través de una intuición intelectual, de lo infinito que se expresa de un modo finito.

Heidegger
De los autores vistos es que menos información encontre al respecto de belleza y verdad. Cabe notar que si todos los anteriores buscan la belleza como justificación a sus teorías Heidegger, no es la excepción y quizás a esto se deba su incomprensión, a la complejidad de sus obras. Los siguientes párrafos son tomados de manera directa, son un poco inentendibles por no decir inconexos, pero en la conclusión lo abordaré de una manera menos teórica.
En Hölderlin y la esencia de la poseía y en el origen de la obra de arte – ambos libros bellamente escritos, breves y legibles- heidegger parece poner toda su confianza en los poetas. Los poetas son los que establecen un mundo y lo fundan y le dan sentido. La poesía es la que nos revela el ser. ¿Cuál es este ser? A menos que el lenguaje de Heidegger se haga menos misterioso y más preciso, debemos pensar que el ser de los poetas o bien es una intuición adherida al sistema de Heidegger o, lo que es más probable, más bien una nueva revelación del mismo ser del hombre que se daba en El ser y el tiempo. Y esta revelación viene a decirnos nuevamente, que nuestro ser es precisamente “sucesiones de difunto”. El otro ser –Dios, la trascendencia, la vida eterna- sigue siendo realidad “sin fondo”.


Conclusiones:

Antes de empezar y tomando en cuenta unos pasos a seguir, la conclusión tendrá dos objetivos: 1º abordar de manera general las conclusiones con respecto a los autores y 2º una conclusión personal con respecto a los que nos compete.
Schopenhauer ve en el arte la posibilidad misma de un conocimiento puro al no estar sometido a la voluntad lo que lo hacia posible como la única salida a la realidad del mundo existente que nos condenase al sin sentido de la vida. Hay una palabra clave en los textos anteriores, la palabra “huir”, entonces interpretaremos que lo que el quería decir es que el arte tiene la capacidad de situarnos en un mundo mejor, en donde las formas son puras, pero estas se contemplan por consecuencia del querer huir del mundo.
La relación belleza-verdad se da ahí donde la voluntad no esta, en la contemplación desinteresada de las cosas.
Nietzche lo llamara justificación, como el medio posible de mejorar ciertos aspectos del mundo, y enfrentar los temores, como la única solución viable de estar sumergidos en este mundo; la relación entre lo bello y la verdad se da en el instinto de poder y de la generación de algo bello a través de la experiencia.
Schelling ve en la filosofía del arte otro tipo de conocimiento como es la creación de algo bello por la unión de lo inconciente de lo conciente, como una proyección del espíritu. Belleza y verdad aquí se funden, como un tipo de conocimiento comprendido y transmitido a través de la obra de arte.
Heidegger dice que la poesía nos revela el ser, en un sentido un tanto psicológico, entenderemos que la poesía es un medio para comprender el desarrollo que tenemos. Me parece que Heidegger se enfoca más al sentido estricto de sus obras que a algo propósitivo. La relación belleza y verdad probablemente la encontremos en la experiencia, como consecuencia de la actividad que realizamos.
Es indudable una relación entre belleza y verdad, aunque son dos cuestiones aun incomprensibles, aunque su indudabilidad se presente a través de las especulaciones y de consecuencias lógicas. La unión por lo tanto es inseparable; a lo bello le sigue lo veradero, como la capacidad del alma de conocer a través de sus impresiones la revelación que nos proporciona la contemplación de la belleza. Por lo tanto las propuestas anteriores quizá no se limiten a un objeto, sino que quieran abarcar una totalidad, lo cual de antemano es difícil pero aún así comprensible; quizá el camino para llegar a la verdad sea la belleza y viceversa, quien quita y sea verdad.


Referencias

-Ramón Xirau. (2003) Introducción a la filosofía de la historia. México.

-Heischberger. Historia de la Filosofía.

-Diccionario de filosofía. 3a edición. Herder.

-Biblioteca de consulta Microsoft encarta 2004. © 1993-2003 Microsoft Corporation. Reservados todos los derechos.

Prólogo a un libro jamás escrito


El “extranjero” nos transporta por un viaje hacia nosotros mismos, a explorarnos, a mirar donde nunca lo hicimos y a veces simplemente a contemplar. Jesús el personaje principal, toma el papel del viajero que cae en una tierra desconocida, que anteriormente le era propia, y de alguna manera nos representa a todos, pues, todos somos extranjeros en un mundo dividido por fronteras, aunque seamos ciudadanos del mundo; vivimos alienados, ensimismados y pensamos que a los ojos del mundo sólo nosotros poseemos la verdad. El “extranjero” es un viaje a nuestro interior, que reflexiona por todos los temas que competen a nuestra existencia, que busca respuestas a través de la interioridad, nos comparte sus respuestas para que nosotros encontremos las propias. La búsqueda incansable de la sabiduría se presenta en las palabras de Jesús, un hombre común, que no puede detenerse en simplemente vivir, el hombre que desea ser niño, el hombre que encuentra la fe, el hombre que sentencia, el hombre que se propone a redimir.
La fuerza, el temple, la inocencia de la búsqueda, las respuestas encontradas a través de su viaje, su humildad y sus certeras palabras, hacen al extranjero una persona con conciencia universal.
Las enseñanzas del “extranjero” se extienden más allá de sus palabras. Callémonos y dejémosle hablar.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

El olvido (Hoy me acordé de ti)

Miré a los olvidados, negué sus nombres y rasgué sus vestimentas... hoy, no hay fecha de cumpleaños... hoy, no se festeja el día de sus muertes...
Hoy, un Cristo en un cuadro decrépito y gastado... ayer, una vida, un cuadro reluciente...

Una cruz de madera seca, echa con la mano humilde de quien enterró a su hermano, sangre de su sangre, se desangra en su memoria...
Levantate y anda... hijo, hermano, padre...
Hoy me acordé de ti...
Mientras oraba...

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Características de un superheroe mexicano

  • Características generales:

    1. La inteligencia no es su fuerte, se deja llevar por los instintos y la intuición o por las corazonadas.
    2. Su conocimiento es empírico, no es teórico, ahí se encuentra su incapacidad de explicar las cosas o sus ideas.
    3. Lo que sabe se lo han contado, nunca ha sometido a una crítica sus pensamientos.
    Siempre cree tener la razón, nunca está seguro.
    4. Es escéptico nunca cree lo que ve, mucho menos lo que no ve.
    Siempre tiene razones que el corazón entiende pero la razón no.
    5. Nunca piensa, siempre actúa.
    6. Nunca se equivoca, sólo pone a prueba el conocimiento de los otros.
    Siempre confía su vida a todos los santos, nunca a su suerte o a su capacidad.
    7. Es rápido de piernas (más vale aquí corrió que aquí murió) y mordaz.
    8. Nunca salva a nadie que no sea a sí mismo.
    9. Nunca pone en peligro su propia vida, sólo la de los demás.
    10. Nunca ve las noticias, él hace las noticias (siempre está desinformado).
    11. No tiene actualizada su lista de enemigos y villanos.
    12. Siempre llega tarde al lugar de los accidentes 30 minutos más que la policía y los bomberos.
    13. Es el enemigo público número uno.

      • Principales características físicas e intelectuales

        1. Ninguna, nadie se acuerda de él, siempre pasa desapercibido, se confunde con el común de los superhéroes mexicanos (si existieran claro).


      LAS 100 RAZONES POR LAS CUALES NO EXISTEN SUPERHEROES MEXICANOS...

      http://mx.geocities.com/las_100_razones/index.html






      LA CUESTIÓN DEL SER

      Del Ser es de lo más grande de lo que se puede hablar, decía Aristóteles, al hablar acerca de las definiciones. Del ser en sí proviene todo lo que forma parte de él, sin el ser nada pudiera ser, excepto la nada. Pero la nada es (aunque la nada, nada es) a costa de que no haya ser, pero el ser existe por lo que hablar de la nada, puede ser simplemente un referente al conocimiento. Cuestión que el nihilismo práctico sabe de antemano, no es que no exista nada, sino que hay cuestiones que no se pueden conocer. Pero el ser no sólo es fundamento del conocimiento, sino de la realidad. Ser o Devenir, cuestión planteada desde Parménides y Heráclito, y aun cuando algo cambie tiene que tener un sustento que no lo haga, sino hablaríamos de algo que cambia infinitamente en acto, o algo que siempre a dejado de ser (que cambia, deja de ser para ser otra cosa), lo que es imposible, por que ya no existiría si dejo de ser, si fuera totalmente cambio. Pero nosotros sólo conocemos lo que se nos presenta, lo que es, no conocemos al ser en general de un modo inmediato, vemos que las cosas cambian, fluyen, pero sabemos que son. Sabemos que son algo, que no son todo, “al contrario de ser nada” y aquí hay una contradicción en el “ser de la nada”. La nada es igual a la nada misma. O existe la nada o existe algo. <>. Nosotros sólo conocemos la nada por lo que no es aun, pues el concepto define algo, que aunque no exista en la realidad es algo, es pensamiento ¿Pero, quién puede pensar la nada? Para pensar la nada, debe hacerlo alguien que sea, que este, que exista. La nada es una negación de “algo”, no es negación de nada (la nada no es); inclusive puede ser la afirmación de algo por contraposición; decir: no es esto, es aquello, es decir que algo es.
      La nada contradice la existencia de lo contingente, lo que es ha sido, dejo de ser. Pero ha provenido del ser, y no de la nada. Pues al dejar de ser, nada es. Aunque en el ser se pueda hablar de una trascendencia, éste ha hecho o causado algo. Si algo es, es producto del ser, no del no ser. Así podemos hablar de seres necesarios, pues no todos los seres (entendidos como entes) son causados, es decir no pueden o pueden no ser, es decir alguno “ha de ser de tal modo que no pueda no ser”. Aunque afirmar que todo necesariamente pueda ser únicamente, es caer en un absurdo, pues hablaríamos de la permanencia en el tiempo, en el infinito, de lo que siempre a existido, y como tal son seres incausados. Permanentes, provenientes de la nada, o de nada anterior a ellos. Es así que la experiencia nos demuestra que hay seres necesarios y otros transitoritorios, contingentes.
      Ante tales cuestiones, el ser se toma como problema, el ser es problema y también un problema del ser. Todo fundamento es quitado. El Nihilismo es su máxima expresión, vivir sin fundamentos eternos. El ser se hace una mera ilusión, de un movimiento unidimensional, lineal. Un movimiento aparente que lleva a la nada. Un recorrido hacia atrás o hacia delante. Eso no que quiere decir que el ser no exista, nos es imposible. El fluir es la respuesta. El ser, que se autoafirma en cada cambio. Que no se pierde, que se mantiene como sustento de sí mismo. Conciencia de sí. Cogito ergo sum.
      La nada está presente en el ser (la nada como determinación del ser), como ausencia de éste, porque sin aquella (el Ser) dejaría de ser, más no existe mientras que el ser y nada se den separados uno y otro. La forma de conocer nos dice que afuera del ser está la nada.
      ¿La nada es origen de algo? La nada no es, no se puede hablar de una identidad ¿Hay algo fuera de la nada? Todo lo que existe. Por lo cual la causa, que necesariamente ha de admitirse, de la realidad cambiante sólo puede ser inmutable.
      ¿Del ser a la nada? De los seres contingentes si. Y aun así sólo dejaron de ser. La nada no puede ser causa de algo. Ni siquiera de si misma, pues seria causa de nada. Y ninguna causa puede tener menos ser que el efecto. El ser es el fundamento único y constitutivo de los entes, entendido esto como: aquello sobre lo que algo se apoya o construye, en tal sentido es también algo que determina.
      El ser, como fundamento de todo, propugna un sentido ontológico, y vital. El sentido ya no se torna un azar. El ser cumple sus funciones en acto según sus potencias. El problema del ser no es más problema, que la afirmación de la nada. La nada no es fundamento ni de ella misma. Quizá sólo sea una herramienta para el conocimiento, aunque la palabra no signifique algo y aunque nunca conozcamos esa experiencia. El ser se muestra como la única verdad de todo lo existente ¿Qué sería la verdad sin sentido? Ya no preguntemos ¿que sería la verdad sin ser?

      lunes, 10 de noviembre de 2008

      Tormenta


      Inhalo


      Una bocanada del cigarro
      Exhalo
      Llenando el vacío de letras humeantes

      A
      M
      O

      rR

      Pienso en ti
      Como suelo pensar al llover
      En las grandes nubes que lloran
      Lloro yo
      Sin saber por qué
      Al mirar las plantas húmedas
      Quiero ver
      Detrás de las grandes nubes
      Al sol salir
      Y reflejarse en las plantas secas

      Soldados retumban con sus botas relampagueantes
      Como balas perdidas las gotas se incrustan en mi ventana
      Una a una forman un río de sangre

      Exhalo
      Mi aliento en el cristal


      Escribo tu nombre

      domingo, 26 de octubre de 2008

      Etérea


      No quiero amarte ni quererte,
      Solo quiero que seas tú
      Cuando estas conmigo,
      El sueño inalcanzable
      Por el que un hombre muere.

      No quiero pedirte que me ames ni que me quieras,
      Solo quiero decir que te deseo
      Como quien revive con un beso,
      Cuando la vida se le escapa
      En el lecho de su última morada.

      Y aún cuando tu ausencia
      Me recuerde cada día que las horas son eternas
      Y la espera se vuelva una agonía,
      Me resisto a invocarte mientras muero.

      Por que quiero sin pedirte que me quieras,
      Como te amo sin quererlo,
      En silencio y con un beso,
      Que me digas: “no soy un sueño”.

      Y despertar y mirarte y que me mires
      Sin decir palabras innecesarias;
      Y abrazarte y que me abraces, y hundirnos en la almohada.

      Que el silencio y la oscuridad
      Hablen por nosotros,
      Pues las palabras mienten, y entre ellas, en la quietud,
      Una ola se estremece.

      Y a lo lejos, cuando te vea partir,
      Quiero que no voltees ni me digas adiós,
      Quiero que nuestro recuerdo sea para siempre,

      Y pensar ¿qué pudo haber sido?



      Odrep Mendoza

      miércoles, 22 de octubre de 2008

      MUJER (en ritmos de un acordeón)


      Mujer
      Mujer
      De donde eres
      Mujer que viajas
      A dónde vas
      Que yo con la mirada
      Y con mis palabras te busco retener

      M U J E R
      Una canción
      Sin voz
      Un oleaje sin mar

      Mujer
      Soy un instante que agoniza

      En los ritmos de un acordeón
      Odrep

      Hoy dejé la puerta abierta

      Hoy dejé la puerta abierta
      Para que volvieras
      La luz encendida
      El corazón herido
      Para que me vieras
      Hoy vendrás a buscarme
      La oscuridad no miente


      Mi guardián te enseñará el camino


      Fumaré un cigarro
      Tomaré vino
      Me embriagaré
      Y moriré
      Esperándote


      Con tu nombre entre mis labios


      Odrep Mendoza

      Mujer etérea-Mujer Pedestre


      Espantapájaros 1.

      “No sé; me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero, al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o con un aliento insecticida. Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias; ¡pero eso si! -y en esto soy irreductible- no les perdono, bajo ningún pretexto, que no sepan volar. Si no saben volar ¡pierden el tiempo las que pretendan seducirme!
      Está fue -y no otra- la razón de que me enamorase, tan locamente, de María Luisa. ¿Qué me importaban sus labios por entregas y sus encelos sulfurosos? ¿Qué me importaban sus extremidades de palmípedo y sus miradas de pronóstico reservado? ¡María Luisa era una verdadera pluma!
      Desde el amanecer volaba del dormitorio a la cocina, volaba del comedor a la despensa. Volando me preparaba el baño, la camisa. Volando realizaba sus compras, sus quehaceres… ¡Con qué impaciencia yo esperaba que volviese, volando, de algún paseo por los alrededores! Allí lejos, perdido entre las nubes, un puntito rosado. “¡María Luisa! ¡María Luisa!… y a los pocos segundos, ya me abrazaba con sus piernas de pluma, para llevarme, volando, a cualquier parte.
      Durante kilómetros de silencio planeábamos una caricia que nos aproximaba al paraíso; durante horas enteras nos anidábamos en una nube, como dos ángeles, y de repente, en tirabuzón, en hoja muerta, el aterrizaje forzoso de un espasmo. ¡Que delicia la de tener una mujer tan ligera…, aunque nos haga ver, de vez en cuando las estrellas! ¡Que voluptuosidad la de pasarse los días entre las nubes… la de pasarse las noches de un solo vuelo! Después de conocer a una mujer etérea, ¿puede brindarnos alguna clase de atractivos una mujer terrestre? ¿Verdad que no hay una diferencia sustancial entre vivir con una vaca o con una mujer que tenga las nalgas a setenta y ocho centímetros del suelo? Yo, por lo menos, soy incapaz de comprender la seducción de una mujer pedestre, y por más empeño que ponga en concebirlo, no me es posible ni tan siquiera imaginar que pueda hacerse el amor más que volando.”

      Oliverio Girondo, argentino.


      viernes, 17 de octubre de 2008

      LA DEUDA

      Desperté con la puesta del sol. Como siempre, mi sueño me hizo desvariar. Es curioso, pero a veces pienso que no despertaré, que moriré a la espera del amanecer, regocijándome con mis recuerdos. Sólo me quedan dos opciones: dejarme morir o aferrarme a la vida. Ahora estoy aquí, no puedo evitarlo.
      Este sentimiento que me invade, la nostalgia de la juventud, del amor perdido, de los sueños irrealizados, me impide vivir en paz. A veces quisiera hundirme en la lejanía, extrañarlo todo hasta al grado que no me quede nada. Contengo la respiración, el ritmo de mi corazón, estable, se deja oír con más fuerza.
      Regreso a mi habitación a soñar con los fantasmas del pasado y los demonios presentes, entro en trance, producto del insomnio. No sé si estoy durmiendo o estoy despierto, todo es a mi voluntad, puedo controlar y detener mi corazón, dejar la vida. Una lágrima me ha revivido. Estoy de nuevo en pie. Me pongo cómodo para arreglar el jardín, corto las flores marchitas, recojo las hojas secas y riego las plantas. Olor a humedad, dulce rocío, contemplo mi obra que comparto con la naturaleza. Ya es hora de ir al trabajo, como de costumbre, llegaré tarde
      Una larga fila de gente me aguarda para pagar sus recibos. La primera es una anciana, me hace un gesto de desagrado, la ignoro, sello su papel; el siguiente es un hombre demacrado, su credencial dice treinta años, pero parece de cincuenta, trata de esbozar una sonrisa pero no lo logra. Ahora le toca el turno a una mujer acompañada de dos niños, el más pequeño, en brazos. El mayor toma mis bolígrafos y la madre lo reprende; pobre, tan joven y hermosa, ya con deudas y además, un crío, qué desperdicio de vida. Un señor de cincuenta años de edad, me observa con fijeza, como si me conociera. Indago en el archivo su nombre y no lo reconozco. Elevo de nuevo la mirada, él se encoje de hombros, toma su recibo y desaparece. Me sumerjo en el trabajo, no soy yo quien trabaja es mi cuerpo, no estoy aquí, es mi cuerpo el que está; recupero de nuevo la conciencia de mis actos, me siento cansado.
      Es el turno de la última persona, me saluda, ¡que asco!, me sonríe mostrando los dientes, me tiende la mano y no le doy la mía, se despide con un una frase hecha. Me ha hecho sentir mal, pobre, que vida le espera. Miro de reojo mis papeles, me voy a casa. Han pagado, según los recibos, doscientas treinta y dos almas del purgatorio. Juego en mi mente con cada uno de los rostros que he visto hoy. Mas tarde, al llegar a mi destino me miro en el espejo, no veo ningún gesto, miro unos ojos cansados, una nariz puntiaguda en la que asoman unos pelillos y debajo unos bigotes cortados a la antigua, pero mi boca no expresa nada, trato de hablar, pero mis labios no se mueven. Ellos, los deudores de rostros demacrados, a los que atiendo cada día, están llenos de vida. En cambio yo…, estoy muerto, no tengo nada porqué vivir, no tengo a nadie, sólo a mi jardín.
      Los días siguientes son iguales, los recuerdos, los mismos, el tiempo se consume lento. Duermo en exceso cuando quiero que el día se vaya rápido, me conservo despierto cuando quiero lentitud. Me enfrento al pasado, de pronto toda mi vida comienza de nuevo…vivo cada uno de los recuerdos con intensidad.
      Una mañana me despierto con fiebre, bañado en sudor. No hago caso, me pongo el saco, tomo el sombrero y salgo a caminar. Es domingo y la gente sale a pasear, estoy divagando, me siento vivo entre gente desconocida, entre rostros siniestros. Necesito descansar, tomo asiento, pequeños demonios ríen cerca de mí, corren detrás de una cabeza que rueda, un ser angelical de cabellos rubios les dice que se retiren, ya puedo dormir. Las horas han pasado, la fiebre también, me duele la espalda.
      Horas después no queda nadie en el parque, la luna me atosiga, estoy muerto de nuevo. Regreso a casa. Reviso los papeles, hago anotaciones en mi libreta, hago cuentas. Dejo todo listo para evitar reprimendas por mis frecuentes retardos.
      Al amanecer, luego de regar mi jardín, parto hacia el trabajo. Llego, observo algunas caras nuevas llenas de vida, de preocupaciones ¡maldita pasividad la mía!, los envidio saben lo que sus vidas valen, y yo deseo mi muerte. Un joven empuja a las personas que están en fila, me llena de vida, me contagia su tormento desbordante. De pronto se le cae de las manos el dinero y lo recoge, moneda por moneda. Trata de adelantarse en la fila y la gente no se lo permite. Sonrío, el tipo me agrada: un poco de malicia le da sentido a la existencia. Lo observo mientras atiendo a otras personas, su sola presencia llena el lugar de luz, la gente no lo soporta. Lo sigo con la mirada, me río. Ahora es su turno, con desesperación me entrega el dinero, morralla, cuento cada moneda, le hace falta un poco, se encoje de hombros, no trae un peso encima, sonrío de nuevo, saco dinero y, sin que el se percate, completo el monto de su recibo. Le debo la vida.
      Al terminar la jornada, por primera vez en mucho tiempo me siento feliz. El tormento del joven de la morralla me devuelve la vida; regreso a casa y escojo el camino que pasa por la iglesia, una luz, quizá de las veladoras, produce destellos celestiales. Hace mucho dejé de creer en esto. No hay más paz que la nada ni más tranquilidad que la del infinito. A pesar de que se me ha hecho tarde, tomo asiento en una banca de la iglesia, mis temores no le deben nada a Dios. Su imagen no produce en mí el efecto de antes, ahora me enfrento solo a mis desgracias. Contemplo el retablo, su arquitectura es muy bella, data del siglo pasado, fue construida con grandes bloques de piedra. Impresionante, parece mausoleo. Dios murió hace mucho tiempo para mí. Un desconocido pasa a mi lado, me saluda después de persignarse, pobre diablo, confiarle la vida a Dios. Ya he alimentado bastante mi orgullo es hora de partir. Cenaré en mi jardín algo ligero y un vaso de vino.
      ¡Qué grande siento el universo! Abro la ventana: esta mañana un hombre me ha salvado y lo busco en las estrellas. Lo esperaré de nuevo, ya vendrá a pagar sus retrasos, llegará a pedir una prórroga para, sin saberlo, satisfacer mi propósito ¡Ya casi me acabo la botella de vino! por cierto, muy barato…, mejor, así llegaré tarde al trabajo y de mal humor.
      No he podido dominar las ansias de verlo de nuevo y llego temprano a la oficina He crecido, la vida para mí ahora es nada, el temor desapareció, pero no mi insatisfacción. ¿Vendrá el muchacho? ¿Llegará otra vez a mi ventanilla a suplicar le sean condonados los intereses de su deuda?
      Han pasado tres semanas y no ha vuelto, se han acumulado ya los intereses, nunca podrá con ellos. Y yo necesito verle para sobrevivir. Meto las manos en la computadora. Unos cuantos ceros menos y ahora su deuda es menor ¿De qué otra forma pagarle? Con sólo pensar en su tristeza, me regocijo, con sólo imaginar su pena, me alborozo, pero el día en que llegue hasta mí, le seguiré el juego: dejaré que tire sus monedas y sacaré algunas de mi bolsillo para completar su pago. Él dará las gracias y yo, en silencio, daré las mías.